Abel Pintos sigue presentando en vivo los temas de "Abel", su último disco por todo el país. A partir de entonces, recorrerá España y de regreso seguirá girando por el país. Para el 8 de noviembre ya agotó las entradas en el Estadio Único de La Plata.

 

En mayo había hecho siete Luna Park. Y para Los Premios Gardel que se entregarán el 4 de setiembre en el Teatro Gran Rex, cuyo Oro Abel ganó en 2013, tiene cuatro nominaciones.

 

"Yo lo vivo con mucha felicidad porque disfruto mucho todo lo que estoy haciendo y me está sucediendo. Me siento muy bien porque puedo disfrutarlo conscientemente, estoy tranquilo y veo que el trabajo que vengo haciendo durante tantos años (17 ya), me permitió estar habitando este vértigo con mansedumbre, aunque parezca contradictorio. (Sonríe). El vértigo está alrededor mío pero por dentro estoy sereno", le cuenta "Río Negro" en entrevista exclusiva.

 

-Como quien ha sembrado semillas hace mucho y hoy ve árboles fuertes que se aguantan los vientos y siguen creciendo bien.

 

-Es cierto y es buena la metáfora. Y además, lo vivo tranquilo y feliz porque no lo siento como un lugar al que llegué, como un punto de arribo, sino de partida. Mirá… Cuando era chico y recién empezaba, no tenía la atención de nadie, los espacios para cantar ni tampoco las herramientas porque mi familia no podía pagar mis estudios de música. Ahora tengo la atención de mucha gente, muchos espacios para cantar casi todos los días y las herramientas que me dio la experiencia y las que adquirí, hoy sí, estudiando. Entonces, tener este panorama no es un punto de llegada, al contrario, es ahora cuando tengo que empezar a crecer, es ahora cuando debo seguir aprendiendo y creciendo. Tomarlo como un punto de partida y no de llegada, me permite disfrutar del momento, de todo lo andado y sentirme seguro y con buenos instrumentos en las manos para construir todo lo que me queda por delante.

 

-Podría ahora decir un largo parlamento elogiando tu trabajo y el de tu banda, en el que también estás metido, pero quiero resaltar cómo usa sonidos que significan. Que apoyan tu modo de cantar y además te rodean de un clima contenedor, sensible, en el que no hay notas de relleno. Por otro lado, te das el lujo de acercarte a un grupo de cámara como el que te acompañó en el Luna Park en mayo.

 

-Es que mientras uno más se descubra y más emociones pueda experimentar y mientras más intensas sean éstas, mayor cantidad de herramientas va a terminar utilizando y explorando para, como dijiste vos, significar las emociones. También se relaciona con lo certero que uno se va volviendo con el tiempo, porque va afilando los bordes de su propia personalidad. Como ser humano, primero, como músico luego. Y en este último aspecto, fundamentalmente por necesidad comunicacional, pule el idioma que va a transformar en propio y va a usar para comunicarse con los demás. Para comunicar una idea o un sentimiento. Entonces, me siento cada vez más seguro dentro de mi idioma, más seguro interpretándome a mí mismo y todos los que trabajan conmigo desde lo musical se sienten más sólidos en el carácter del audio. Cada vez vamos hacia un lugar más certero. Podemos hablar con mucha mayor claridad. Un poco lo que antes te decía, eso lo brinda la experiencia sumada a la expectativa y a la curiosidad por lo que viene.

 

-Tengo una sobrina nieta, pequeña, con esclerosis tuberosa, un trastorno genético poco frecuente y complejo. Y por eso he conocido, indirectamente, a dos chicas de más de veinte años, que también lo tienen y te siguen con un amor particular, fuera del aura de la fama y de cualquier especulación. Tu música les hace bien… Algo hay en el contacto de tu música con su sensibilidad, mucho más fuerte que cualquier aparato de difusión. Cuando un artista logra eso, ha tocado un territorio muy profundo de sí y en el otro…

 

-Gracias… Me emociona lo que la música puede provocar en otro ser humano porque en mí provoca muchas cosas. Y me emociona mucho poder dedicarme a ella y que lo que hago conmueva de esa forma. De alguna manera, cuando me decidí a cantar, fue porque me sentía tan feliz escuchando a Mercedes Sosa y pensé: si ella me hace sentir tan bien, yo tengo que ser feliz dentro de lo musical. Como dos más dos es cuatro. Hoy, sentir que mi música le hace bien a otros, es continuar esa cadena y reafirmar mi fe en que senté las bases de mis deseos y de mis sueños en un buen lugar.Es sabido, porque me muestro así, que valoro las emociones y estoy muy en contacto con las mías y no tengo problema en demostrarlas y exponerlas. Eso, tal vez genere una predisposición en quien me escucha, a compartir las suyas, a través de la música. Estar en un concierto y llorar, yo, alguien entre el público, habla a las claras de dos personas, una abajo y otra sobre el escenario, absolutamente abiertas a exponer su sensibilidad y compartirla. De otro modo, no me permitiría llorar por una cuestión protocolar escénica…

 

-Repasando tu agenda, está cargada con recitales y viajes casi diarios. ¿Te queda tiempo para estar con vos mismo, para tus gustos, para leer, por ejemplo?

 

-Sí porque ese es mí tiempo. Todos los días hago lo que más me gusta hacer y me atrevería a decir sólo lo que me gusta hacer. Todos los días canto, hago algo con mi música, leo. Tengo mis espacios y mi tiempo porque yo soy esto. Me dedico a ser yo mismo.

Fuentes: Rionegro.com.ar

Ya instalado en la ciudad, Abel Pintos brindó una conferencia de prensa

El cantante se presentará esta noche en el Polideportivo del Boxing Club con entradas agotadas. Durante la tarde de ayer dio una conferencia donde expresó sus primeras sensaciones y habló de lo que será el show de hoy. Decenas de seguidoras realizaban guardia en el hotel donde se hospeda Abel.