Abel Pintos: “Soy muy feliz al reinventarme todo el tiempo”
San Juan. - El cantante, que se presentará esta noche en la 50º Fiesta de la Tradición Jachallera, habló con Diario El Zonda sobre los cambios que desató “Reevolución”, su séptimo disco. Con 26 años y 15 de trayectoria, logró consolidarse como uno de los referentes del nuevo folclore. Un artista con creatividad sin límites.
S
er ahijado artístico de León Gieco dejó de ser su primera carta de presentación desde hace tiempo. Y es que Abel Pintos supo construir su propio camino en el que se propuso crear sus esquemas. ¿El resultado? Un séptimo disco, “Reevolución” editado en agosto, y que ya es todo un éxito. A horas de llegar a Jáchal para actuar en la 50º Fiesta de la Tradición, habló en exclusiva con Diario El Zonda.
¿Qué faceta tuya revela este disco?
Más allá de que pasaron 15 años y 7 discos, todavía soy todavía un artista en evolución. El disco, el cuarto para el que compongo, tiene que ver con lo que vengo proponiendo desde el principio de mi carrera pero, también, involucra una búsqueda donde me jugué a descubrirme más aún en la autoría, en la forma de interpretar las canciones y el sonido del disco.
¿El proceso te resultó sencillo?
La verdad que sí, fue muy placentero y debe ser porque responde a mi personalidad. Soy muy feliz al reinventarme todo el tiempo, tanto en lo personal como en lo profesional. Disfruto de descubrir, aprender y hacer eso en el género no me genera ningún conflicto. Por suerte, mis intentos de cambiar y mejorar fueron recibidos con mucho respeto y cariño por parte del público y de los artistas.
¿En qué se diferencia “Reevolución” de tus anteriores trabajos?
En el concepto, ya que el audio del disco es un poco más agresivo y más sanguíneo. Tiene más actitud y va de frente.
¿Cómo tomás las opiniones sobre tu estilo, que rompe esquemas dentro del folclore?
He tenido críticas que responden al trabajo y siempre fueron constructivas, lo que me parece válido. Está bueno que haya tanto músicos tradicionalistas y otros como yo, que hacemos cosas que pretendemos sean tradición, algún día.
¿Cuál es la historia que motivó “No me olvides”, el primer corte ?
La distancia, para los que vivimos viajando, es un tema muy recurrente. Uno no se acostumbra y todo el tiempo estás negociando el estar lejos. “No me olvides”, es la canción en la que le digo a todas las personas de las que me fui alejando que las llevo en mi corazón y en lo más profundo de mi alma. Estaré volviendo siempre, aunque yo vivo en y de la distancia.
Y en las giras y los viajes te encontrás con el público, ¿cómo te llevás con las redes sociales?
Tanto Twitter (@AbelPintos), Facebook (Abel Pintos- oficial) y mi página oficial son medios que utilizo mucho y que son muy divertidos e interesantes. Les doy importancia porque son mi manera de estar en un constante y diario contacto con gente de Argentina y de distintos países, que me acompañan con sinceridad y cariño.
¿Cómo te sentís en el estudio y en los escenarios? Dos lugares fuertes para un artista...
Son muy importantes. El estudio significa un momento de mucha creatividad a flor de piel. Es un tiempo de proyección, de deseos y de pensar en qué camino se quiere continuar. Y por otro lado, estar arriba de un escenario es lo que soñé toda mi vida y lo que anhelo todos los días. Allí todo culmina, todo cierra, y toma real sentido lo que hacemos.
¿Qué recordas de San Juan?
Los mejores y cada vez que vamos, el público nos recibe con un cariño enorme. Se que se ha generado mucha expectativa en Jáchal y que mucha gente viajará varios kilómetros para vernos. Por razones como ésta, siempre voy a participar en los festivales. En ellos, nací y crecí y son las ocasiones de mayor contacto con el pueblo. No quiero perder el contacto con esas fiestas nunca.
El Zonda/Jueves, 18/11/10
Noviembre 2010
Abel Pintos: "No pretendo cambiar el folclore, pretendo aportar"
Cuando apareció en escena, a los 13 años, muchos coincidieron en definirlo como "la gran promesa del folclore". Hoy, a los 27 y con siete discos en su haber, Abel Pintos dejó de ser una posibilidad a futuro para convertirse en una de las voces jóvenes más importantes de la música tradicional.
Mucho tiempo pasó desde el momento en que Raúl Lavié y León Gieco oficiaron como sus descubridores. En el medio hubo giras e importantes premios, entre ellos, "Mejor Intérprete" en el Festival Viña del Mar 2004 y "Consagración" en Cosquín 2008. Pero el salto más importante lo dio cuando pasó de ser intérprete a cantautor.
Catorce años después de su primer disco, Abel Pintos dialogó con ámbito.com acerca de su carrera, sus próximas presentaciones en el Teatro Ópera y su último trabajo, "Reevolución".
Periodista: ¿Qué diferencia siente al interpretar respecto a sus comienzos, a los 13 años?
Abel Pintos: Dentro de los subjetivo, las diferencias que puedo sentir tienen que ver con entender lo que estoy diciendo, me siento bastante más habilitado para ciertas cosas. Cuando empecé tenía 13 años, entonces toda canción de amor que cantara no tenía prácticamente ningún fundamento más que algo lindo y agradable al oído desde lo poético o lo musical. Era, de alguna manera, elegir canciones para interpretar por comodidad a la hora de cantar más que por transmitir algo con lo que estaba diciendo. Y eso me pasaba con muchas otras cosas, en la gran mayoría... porque si la canción tenía una connotación social, si bien uno es parte de la sociedad, de todos modos por ahí no comprende el contexto. Además cuando empecé y hasta no hace muchos años atrás era intérprete de canciones de otras personas. Así que había que saber en qué momento y de qué manera esa persona escribió esa canción. Ahora que crecí y que entiendo de todas las materias que puedo abordar en la música siento más autoridad para poder hablar y transmitir más desde ese lugar, fundamentalmente porque ahora las canciones ahora son mías.
P: ¿Dentro de qué género se ubicaría?
A. P: Yo no etiqueto mucho las cosas pero entiendo que hacen falta títulos para poder ordenar. Considero que soy un músico folclórico, no tradicional. No respondo a las cosas que ya existen sino a la necesidad que tengo desde mi lugar de músico y de amante de la música folclórica de nuestro país y de Latinoamérica de crear nuevas cosas dentro de ese género ya existente. No pretendo cambiar el folclore, pretendo aportar. Pienso que todo lo tradicional que existe es valiosísimo y es importantísimo que lo conozcamos todos los jóvenes, que sepamos de qué se trata, que sepamos valorarlo y mantenerlo en el tiempo. Pero también creo que es importante que todas las generaciones podamos sacarle jugo a la posibilidad de generar cosas que dentro de muchos años también pasen a formar parte de la tradición. Doy mi versión de lo que conozco: conozco el folclore de esta forma y lo versiono. No sólo eso sino que intento crear cosas que puedan resultar parte de la familia de la música tradicional argentina con el paso de los años.
P: ¿Existió la llamada 'nueva ola del folclore' o fue un fenómeno comercial?
A. P: Yo creo que las nuevas olas de la música, cada una determinada cantidad de años se dan constantemente en todos los géneros. No sólo sucedió en el folclore. Los intérpretes jóvenes siempre estuvieron, lo que no había era espacio. Era difícil encontrar lugares y oportunidades para tocar si eras joven y querías cantar folclore. Pienso que la nueva generación de la música folclórica no respondió solamente a una situación comercial. Por otro lado, explotó comercialmente: empezó a redituar a todos los sellos discográficos, a los medios y a los productores porque se empezaron a vender muchos discos, muchos tickets, muchas giras. Todo eso respondió a una evidente sed que había por parte del público, de toda una generación que no conocía la música folclórica porque no tenía un referente par.
P: ¿Quiénes son sus referentes dentro de la música?
A. P: Son muy variados porque siempre escuché muchos estilos distintos. Es mi referencia máxima Mercedes Sosa, siempre lo fue, empecé a cantar por ella. Pero también León Gieco, con quien trabajé y trabajo hasta el día de hoy. Pedro Aznar, Divididos, Bersuit Vergarabat. Me gusta Megadeth, Metallica, Nirvana, Marc Anthony, Plácido Domingo. Soy bastante ecléctico y sanamente desordenado en los gustos musicales. Me gusta y me nutro de todo.
P: ¿Cómo fue que Cristina de Kirchner eligió su canción, "Tu voz", para su campaña?
A. P: Mi pensamiento político lo expreso cuando voy a dar mi voto en cada elección. Y después, hablo cuando estoy de acuerdo o en desacuerdo con un tema que nos pueda tocar a todos. Cuando el que hoy es el Gobierno tomó "Tu voz" como canción de cierre de la campaña, primero me tomó muy de sorpresa. Me enteré mucho tiempo después de que esto había empezado, de hecho, casi en el cierre de la campaña y ya hacía un año que estaba pasando. Independientemente de lo a favor o en contra que pudiera haber estado en cuanto a las formas políticas de este partido o de la Presidente, me pareció que de inmediato quedaba claro por lo que es la canción, que ella había elegido el tema no por una cuestión de mensaje proselitista sino porque realmente gusta de mi música. Yo no voy a decir quién tiene que gustar y quién no tiene que gustar de mis temas. Hubiera sido motivo de diferencia si elegía alguna otra canción mía que tenga un mensaje esperanzador y yo no hubiera estado de acuerdo con que eso esté en su campaña. Me resultó igual cuando se escuchó "Tu voz" al final de un acto político que cuando voy caminando por la calle y una persona está lavando el auto y poniendo esa canción.
P: ¿Cómo es su momento de componer?
A. P: No soy muy estructurado para componer, en realidad no soy estructurado en nada. No tengo una forma, un día, un momento, un instrumento. Puedo decir que compongo sin instrumentos porque sé tocar guitarra y algo de piano pero no sé tanto como para tener la libertad de hacer mucho, me siento bastante limitado. Compongo simplemente con la voz, normalmente sale la letra y la música a la vez, como si fueran canciones que ya existieran en mí. Y en cuanto a los conceptos o a las temáticas soy muy autoreferencial, todo lo que escribo, sea una historia personal o no, tiene muy impreso lo que es mi pensamiento y mi sentimiento hacia lo que estoy diciendo.
P: ¿Sigue creyendo en el disco como industria?
A. P: Sigo creyendo en el disco como industria, no por una cuestión comercial. Sí lo creo desde un lugar romántico. Defiendo y me gusta el disco como formato. El disco tiene desde el arte un medio de expresión que no tiene la música digital. La fotografía, el diseño, el hecho de que uno pueda hacer una obra conceptual. Lo que estás escuchando lo podés ver reflejado no sólo en el librito sino en las imágenes. Además por una cuestión física. Siento la música en los formatos digitales como válidos, es una evolución del mundo. Pero siento más amor por el disco. Independientemente de si va a desaparecer o no, no estoy preocupado porque me parece que todo responde a como las cosas van cambiando y se tiene que acomodar. La música se va a seguir haciendo y se va a seguir reproduciendo de distintas formas pero va a seguir todo igual. De hecho ha cambiado de formato cientos de veces y todo continuó y se adaptó.
P: ¿Cómo definiría su último disco, "Reevolución"?
A. P: "Reevolución" es mi séptimo disco y es el cuarto como autor y compositor. Continúo lo que vine presentando en los anteriores pero también pretendo dar un paso nuevo dentro de lo que es la creación del estilo que voy formando a través de los años. Conceptualmente, en el audio, en las letras y en la interpretación es más sanguíneo, bastante más atrevido que los anteriores. Tiene como mensaje que estoy profundamente agradecido por todo lo que viví pero es mucho más grande la sed que tengo de seguir creciendo y aprendiendo. Los conciertos en el Ópera van a ser con un concepto bastante intimista. La idea es presentar socialmente por primera vez las canciones. Hay muchos recursos de espectáculo como los videos que vamos a guardar para un concierto muy importante del año que viene en Capital, donde además quizás podamos filmar mi primer DVD. Ahí va a ser un lugar bastante más grande y vamos a dar festejo a todo lo que viene pasando con mi música y a la consideración que tienen para conmigo.
Entrevista de Guadalupe Rivero - Ambito.com
Abel Pintos, la avanzada de lo que fué el folklore joven , en la era de la madurez.
En version propia
Dice que quiere dar su propia versión del folklore. Que no quiere repetir fórmulas en sus discos. Y asegura que esta etapa nueva de su vida comenzó primero a vivirla desde adentro, desde lo espiritual. Con flamante disco, Abel Pintos se encamina a realizar una nueva versión del foklore, pero con sello personal. El 1 de septiembre se presenta en General Roca.
Abel Pintos se encuentra estrenando su nuevo trabajo, el séptimo en su carrera: “Re evolución”, placa que presentará el 1 de septiembre en el Aniversario de General Roca, y que posteriormente lo llevará en una gira por el país. Este nuevo trabajo contó con los arreglos y la dirección musical de Marcelo Predacino y Ariel Pintos (su hermano) y fue grabado entre marzo y abril pasado bajo el sello Sony Music en “La Casa de la Música” Villa Mercedes, San Luis.
Con un aire renovado, Abel (26) intenta manifestar una nueva faceta y una renovada visión del folklore, además de la alegría y el reconocimiento que siente al haber desarrollado su carrera tan rápida y exitosamente. La intención parece ser volcar en sus letras y melodías un nuevo enfoque musical y, de alguna manera, compartirlo con su público. A partir de su vida cotidiana y su sentir intentó plasmar su nueva veta artística a través de la que se define como un ‘cantante folklórico no tradicional’. Pero a pesar de estas innovaciones, también intentó no perder sus raíces que lo han nutrido desde sus comienzos. Allá por 1997 cuando con tan sólo 13 años editó “Para cantar he nacido”, álbum producido por León Gieco. Desde allí pasando por su álbum “Sentidos” (2004), donde decidió lanzarse a componer sus propios temas, hasta ahora presentando una nueva tendencia musical, Abel sintió haber crecido lo suficiente como para seguir ampliando su panorama musical. Al menos así lo afirma.
Las 12 canciones que conforman su nuevo disco, en su mayoría fueron compuestas por él. Entre los temas figuran “No me olvides” -primer corte del disco- “Flores en río” y “Aventura”, este último registrado con la compañía de Marcela Morelo. También hay espacio para una versión de “Halleluja”, el único tema que no le pertenece. Con este trabajo, el pibe de Ingeniero White propone la "Re evolución" del género y de su estilo del propio.
¿En qué momento de tu carrera te encuentra Re evolución?
Es un momento donde disfruto mucho de todas las cosas que viví, con todos los discos que grabé hasta ahora, y con todo el éxito que tuvieron cada uno de ellos. Pero también con el deseo de seguir creciendo y de ese crecimiento poder seguir ofreciéndole nuevas cosas al público que me acompaña tan generosamente durante tanto tiempo con más intensidad.
Con este trabajo ¿apuntás a abrir el juego para un nuevo estilo folklórico?
Apunto a aportar nuevas formas de versionar e interpretar el género de la música folklórica… no quiero cambiar el folklore. Quiero dar mi propia versión.
La versión de Abel Pintos del folklore…
Esta visión ¿marcaría una nueva etapa en tu carrera?
Es que tiene que ver justamente con lo que decía. Disfruto mucho de lo que he hecho hasta ahora. Pero no quiero repetir fórmulas porque me fue bien con el disco anterior. En esta oportunidad quise hacer un disco que tiene que ver y está dentro de la línea de lo que venía haciendo, aunque a su vez tuviera sus propias intenciones, no quería repetir una fórmula.
Re evolución incluye una canción llamada “Aventura” junto a Marcela Morelo. ¿Cómo surgió el tema y la idea de cantar con ella?
La letra la hice yo y la música la hizo mi hermano. Quería invitarla a cantar a Marcela (Morelo) y tenía que buscar en qué canción podía ella participar. Cuando compuse “Aventura” sentí que iba a quedar muy bien y que ella iba a enaltecer la apertura, que ya de por sí, pretendía en la letra. Entonces la invité, aceptó y realmente me honra con su presencia en el disco.
¿Por qué escogiste “Halleluja”, tema que difundió León Gieco?
“Halleluja” es una canción de dos autores alemanes. Es una canción que León Gieco tradujo y trajo al español en la década de los ‘90. Elegí hacer un cover porque mucho tiempo fui intérprete. Me divierte versionar canciones de otros y quería volver a hacerlo después de tanto tiempo. Quería volver a interpretar aunque sea una canción. Hice esta canción porque me identifica, porque tiene que ver con el concepto general del disco y porque es una canción que me gusta mucho desde hace muchos años.
El álbum pretende contar un cambio interior. ¿Cómo se dio esta transformación?
Los procesos empiezan desde uno mismo y después se materializan. Esta etapa nueva que estoy viviendo en mi carrera empecé a vivirla primero en mi vida y en mis cosas personales, en mí. Es como crecer, esta situación de querer crecer, de querer descubrir y vivir más cosas de las que ya viví hasta ahora es un incentivo que tengo primero desde lo espiritual y después desde lo musical.
Y en tu vida ¿adónde lo ves reflejado a ese cambio?
En que tengo 26 años y viví cosas muy intensas, en eso… no hay algo literal… es una emoción, es el amor que siento por la vida es el deseo de crecer, deseo de disfrutar cada día más de las cosas que esta vida hermosa me regala. Es lo que trato de expresar a través de este nuevo disco.
En cuanto a lo musical, ¿esta novedad te dejaría fuera de la definición de músico de folklore?
No soy de poner etiquetas a la música o a la vida. Lo que sé es que soy un músico folklorista quizás no tradicional. Pero podría definirme como un músico folklórico que hace música popular argentina.
Y la vieja guardia del folklore, ¿cómo notas que recibe estas innovaciones que planteas en tus discos?
Hay público al que le gusta y hay público al que no. La verdad que no estoy pendiente de eso porque hago mi música folklórica y muestro el respeto que siento hacia ella y hacia el género que he elegido. Lo que hago, lo hago con todo el corazón y con todo el respeto. Después va a haber gente que la va a elegir, que le va a gustar y gente que no.
¿Qué músicos influencian tus composiciones o son referentes en tu carrera?
En mis composiciones no me influencia ningún músico. Trato de no tener influencias compositivas. Pero en general Mercedes Sosa, Rubén Blades, Pedro Aznar, León Gieco... No sé, me gustan muchos músicos… la verdad que es muy difícil (risas).
Volviendo a tus inicios, ¿el hecho de comenzar tu carrera como ‘una de las jóvenes promesas del folklore’ es un honor o lo sentiste como un condicionante?
Pienso que fue un título que pudo haber puesto la prensa o el público eso de ‘promesa del folklore’, porque yo era un niño, entonces, por eso lo de ‘promesa’, para ver qué iba a pasar conmigo con el paso del tiempo. Para mi fue un honor ser considerado siempre por el público y por la prensa. Eso es lo que más me importó, me importa y por lo que me encuentro muy agradecido independientemente de los distintos títulos que me puedan haber puesto en las distintas etapas de esta carrera.
El haber comenzado esta carrera con reconocimiento masivo siendo un niño, ¿Cómo lo viviste y cómo lo vivís ahora?
Feliz. Porque hace mucho tiempo que tengo la oportunidad de cumplir mis sueños, con la música y de mi vida. Empecé de muy chico y lo disfruté mucho, y lo disfruto mucho todavía.
¿Qué recuerdos tenés de la época en que viviste en Cutral Co?
En la época en que viví en Cutral Co, tenía cuatro años y estuve hasta que tuve nueve. Estuve cinco o seis años, en mi infancia ahí. Recuerdo cosas vividas con parte de mi familia que todavía vive ahí. El jardín, los primeros años del colegio primario… recuerdo a mi primera maestra de música y el equipo de básquet al que seguía que era “Petrolero”. Tengo recuerdos que son los recuerdos que normalmente uno tiene de la infancia.
Tu primera actuación sucedió en el centenario de Ingeniero White, donde interpretaste temas de León Gieco, Víctor Heredia y Horacio Guarany ¿esa primera selección la hiciste vos?
Sí. Hace poco, el 17 de agosto se cumplieron quince años de esa fecha. Elegí esos temas porque me gustaba mucho cantar sus canciones.
Y después se dio la conexión a través de Raúl Lavie con León Gieco…
Sí. En el año 97 lo conocí a Lavie en un concierto, le di un demo mío el se lo dio a un productor que se llamaba Pity Yñurrigarro. Él era el productor de León Gieco desde los comienzos de León y ese productor me contrató de sorpresa y le propuso a León ser el productor de mi primer disco y él aceptó. Así fue como nos conocimos y empezamos a trabajar juntos.
¿Qué significa León Gieco para vos?
Una escuela impagable, una escuela que me regaló Dios porque realmente aprendí muchas cosas de él en la música y en la vida.
¿Cuáles son tus proyectos a futuro?
Ahora estoy en la etapa promocional presentándolo a la prensa y en festivales, donde adelanto algunas canciones. Más adelante vamos a empezar una gira muy grande por todo el país presentando todo el disco.
Entre estos adelantos vas a estar en General el próximo mes
Sí, tengo mucha expectativa porque es una ciudad que me ha demostrado mucho cariño siempre. Es toda una región que siempre me ha demostrado mucho cariño, así que voy a dar un concierto con las canciones de toda mi carrera y también voy a cantar algunas canciones de este disco nuevo.
El honor de cantar con la "Negra"
El cantautor, a pesar de su "corta" edad (26) y habiendo cumplido ya más de trece años de carrera, en su haber cuenta con experiencias que parecen pertenecer a un artista veterano. De hecho, ha compartido escenario con grandes figuras de la escena nacional como León Gieco y Mercedes Sosa. Sobre esta última Abel consideró "que ha vivido muchas cosas" y que cantar con Mercedes Sosa "ya es una anécdota".
Además de sentirla como una figura primordial en su carrera, Abel tuvo el honor de conocerla de cerca. “La conocí desde muy chico y siempre me dio la oportunidad de poder estar a su lado y aprender mucho de ella, como también lo hizo León Gieco. Eso me honra”, afirmó orgulloso Pintos.
Entre otras intervenciones en 2001, Abel incluyó una versión de “Himno de mi corazón” junto a la "Negra" Sosa en su álbum “Cosas del Corazón”. En ese disco también participaron Andrés Giménez de A.N.I.M.A.L., Carlos Buono, Domingo Cura, Nuria Martínez y León Gieco, entre otros.
Carrera Intachable
Desde el comienzo de su carrera Abel ha recibido varios premios recorriendo festivales nacionales e internacionales. Al consultarle sobre qué disfruta más en sus presentaciones afirmó: “El escenario… todo lo que encierra. El subir a cantar y que haya alguien escuchándome”. Abel parece dejar todo en sus actuaciones y por ello ha recibido numerosos galardones. Con su primer álbum “Para cantar he nacido”, consiguió reconocimiento en los Festivales Folklóricos más importantes del país. Ese mismo año durante el 38º edición del Festival de Cosquín (1998), tuvo la posibilidad de presentarse tres veces en ese escenario mayor. La primera fue el 25 de enero, donde interpretó tres temas de su primer trabajo discográfico: “Cuando llegue el Alba” a dúo con Gieco, “El 180”, y su corte de difusión. A partir de la respuesta excelente de la gente, fue invitado nuevamente al festival. En aquella ocasión recibió la “Mención especial”, otorgada por la comisión de folklore y el Cosquín de Oro 1998, entregado por SADIC a los artistas.
Entre otros grandes eventos, Abel se ha presentado en festivales donde recibió galardones como Intérprete de la canción ganadora y mejor intérprete del XLV Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar (2004), Premio Revelación en el Festival de Baradero (2002), Premio Revelación en el Festival Jesús María (2001). También recibió el Premio al Mejor Álbum de folklore Alternativo en los Premios Gardel (2008).
Fuente: Diario La Mañana Neuquen
“Di varios pasos, pero todavía estoy en la búsqueda”
Entrevista Abel Pintos. A los 26 años sacó su séptimo CD, “Reevolución”.
La tapa del nuevo disco de Abel Pintos es elocuente. El título es Reevolución y en la foto él aparece rapado, sobre un fondo de edificios, el mismo paisaje urbano que continúa en las imágenes del librito interior y que le es familiar: hace rato que cambió Ingeniero White por Caballito. Las canciones completan el cuadro: Pintos está cada vez más melódico, más urbano y menos folclórico. El está de acuerdo, pero a medias: “Nunca tuve prejuicios. Siempre reconocí que no soy de los folcloristas más tradicionales. No tengo el estilo del Chaqueño Palavecino, aunque lo admiro. Los jóvenes tenemos el deber de conocer las tradiciones, pero está en nuestras manos generar formas nuevas que dentro de 40 años sean tradicionales a su vez y sumen a la cultura. De mis siete discos, sólo tiene canciones tradicionales el primero, que funcionó como carta de presentación”.
Había que presentarlo así porque ese primer disco salió cuando tenía 13 años: hacía poco que había sido descubierto por Raúl Lavié en Bahía Blanca y que León Gieco se había hecho cargo de su padrinazgo artístico. Pintos apareció en la misma época en que Soledad y Luciano Pereyra removían las estancadas aguas del folclore, y en estos años construyó una carrera menos ruidosa, pero tan constante como la de ellos. El salto de popularidad, dice, llegó con su disco anterior, La llave . “Di varios pasos en convocatoria: ahora toco en salas más grandes, con giras de teatros y estadios cubiertos por todo el país. Pero no quería hacer La llave 2 . Pretendo evolucionar. Tengo 26 años y mucho por aprender. Todavía estoy en la búsqueda”.
Entre la gente que lo sigue sobresalen, por lejos, las mujeres, tan atraídas por su voz como por su pinta de chico bueno, sencillo. Alto, flaquísimo, tiene estampa de galán tierno. “Sí, en mis conciertos predomina el público femenino. La diferencia es que ahora que crecí vienen a verme chicas de 15 y mujeres de 40. Soy sensible: nunca tuve problemas para expresar el amor que siento por alguien”.
La gran duda es cómo hace para repartir ese amor entre tanta demanda. Abel sonríe: “Hay mucho de mito. No puedo decir que todo es mentira, porque la realidad es que me conocen y conozco a muchas mujeres, y probablemente tenga más posibilidades que amigos que se dedican a otros trabajos. Pero no soy un tipo que esté en postura de sex symbol o que se esfuerce por gustar, aunque cuido las cuestiones estéticas”.
Y entonces menciona a Madonna y sus cambios de look disco tras disco: con esa idea es que él se despidió de sus rulitos. También habla de Dread Mar I, de heavy metal (“me encanta”) y de cumbia: “No me da miedo incorporarla, porque es parte de nuestra tradición. La cumbia santafesina es tan parte del folclore santafesino como Santafesino de veras . No se trata de mantener la imagen de un hombre vestido de gaucho con un caballo. Los tiempos cambian”.
Fuente: Clarin
"Eramos los chicos precoces del folklore"
En el disco Reevolución, ofrece un nuevo sonido y otra actitud en las letras, que presenta en el Teatro Opera
Muchos hubieran pensado que la aparición fulgurante de Abel Pintos en el panorama de la música popular allá por 1997 se iba a diluir como el paso de una estrella fugaz. Tenía tan sólo trece años de edad cuando grabó su primer disco y se subió al escenario de Cosquín. Rápidamente se transformó en una de las jóvenes promesas de una escena confusa que necesitaba ídolos juveniles, cuyos casos más visibles eran Soledad, Luciano Pereyra y toda la camada del llamado folklore joven.
"Hoy nos veo a todos más maduros artísticamente -reflexiona un Abel Pintos de 26 años-. Luciano hace poco volvió con un disco nuevo buenísimo y con una sensación de seguridad enorme. Con Los Tekis y Soledad pasa lo mismo. Creo que esto tiene que ver con el tiempo. Seguimos creciendo y no somos artistas ya definidos. Todavía estamos buscando un estilo propio. Si bien tenemos 10 o 15 años de carrera, fuimos muy prematuros y éramos los chicos precoces del folklore." Siete discos después, el presente de Abel es muy distinto. Su producción más reciente, Reevolución -que presentará hoy y mañana en el Teatro Opera Citi-, es un paso clave en su recorrido como artista. El cambio de sonoridad, actitud y look que refleja en el disco tiene que ver con la propia decisión de asumir nuevos riesgos. "En agosto del año pasado tuve una reunión con la gente de la compañía y les anuncié que las letras iban a venir más sanguíneas, y quería un concepto más atrevido para el nuevo disco. Necesitaba ir más para adelante, porque buscaba evolucionar y seguir creciendo. Necesitaba otro audio que mostrara quién soy, aunque sigo unido al de mis discos anteriores. Quiero crecer, descubrir y experimentar", cuenta Abel, con la adrenalina lógica de un músico que transitó pubertad y adolescencia sobre los escenarios.
La sed verdadera
Las guitarras distorsionadas, las voces con matices rockeros, el beat del pop, los aires de chacarera, zamba y tinkus junto con la efectividad de canciones estribilleras que recuerdan a Calamaro resuenan y se plasman en su nueva estructura molecular como músico de folklore. En Reevolución (un juego de palabras que sintetiza el espíritu del disco) su crecimiento no suena forzado. Pintos es una confluencia generacional de sonidos que fueron captando sus sentidos.
"Me considero un artista folklórico, pero al no ser un tradicionalista puedo crear otras cosas, que quizás mañana sean parte de la tradición.Soy un músico dando mi propia versión del género. Respeto mucho lo que me influencia a nivel generacional y me hago cargo de eso. Escucho mucho rock y música centroamericana y eso forma parte de mi sonido tanto como el folklore", cuenta el cantor, que coquetea sin prejuicios con artistas de distintos estilos, desde Andrés Giménez, de D-Mente, hasta Marcela Morello, que participó en su último álbum.
Esa facilidad para moverse con naturalidad entre diferentes artistas (imitando el gesto abierto de Mercedes Sosa, su referente principal, con quien grabó un dúo en Cantora y compartió repetidas veces escenario) abre el abanico generacional de sus seguidores. "En mis conciertos veo gente con remeras de Calamaro o NTVG; también me pueden seguir los más tradicionalistas en los festivales de folklore; o puedo aparecer cantando en un lugar después de pasar veinte bandas de cumbia. ¡Eso me parece genial! Es lo que busco hacer, algo universal. Soy un músico popular, eso quiere decir que es la música que escucha el pueblo, y ellos eligen rock, cumbia o folklore. No hay necesidad de etiquetarse."
Con 26 años, Abel Pintos está viviendo su propia revolución interior y exterior. Dice que está entrando en una nueva era sónica. Y así lo canta, en el leit motiv de su disco Reevolución : "Me cansé de tropezar y romperme la cabeza contra la pared. Y si no lo cambio yo, esta historia se repite, siempre una y otra vez. Hay una revolución despertando, en el centro de mi espíritu, sin violencia ni dolor. No hace falta estar despierto para ver la luz del sol". Por eso, parado en el medio de su vida como artista, Abel Pintos puede echar un vistazo hacia atrás y ver cómo las olas de la moda pasaron y él se mantiene en pie. "Viví muchas cosas intensas [incluyendo que la presidenta Cristina Kirchner usara su tema "Tu voz" en tiempo de campaña] y quiero vivir muchas más. Es un momento de agradecimiento por las cosas que me pasaron, pero ahora tengo sed de aprender más."
Gabriel Plaza - La Nacion
Setiembre 2010
El cantante Abel Pintos buscar dar "un paso más" en su carrera y tratar de imponer su "versión de la música folklórica y popular argentina", con la temática
El cantante Abel Pintos buscar dar "un paso más" en su carrera y tratar de imponer su "versión de la música folklórica y popular argentina", con la temática que eligió para su nuevo disco "Reevolución", que presentará el 5 y 6 de noviembre en el Teatro Opera de esta ciudad.
"Me siento parte de una generación que pretende encontrar su versión de las cosas y espero que aparezcan más referentes de esta propuesta", dijo el intérprete en diálogo con DyN.
El cantante explicó que para componer es "autorreferencial", escribe "de lo que siente y piensa", y comentó que para su nuevo disco incluyó "historias propias y ajenas".
Pintos se presentará en noviembre en Capital Federal, luego de dos años de actuaciones en el interior del país, con los temas de sus CD "Reevolución", en la sala de avenida Corrientes 860.
La siguiente es una síntesis de la entrevista que Pintos brindó a la agencia DyN:
*DyN: ¿Cómo elaboró las canciones de "Reevolución?
*AP: Las hice con intención de que se complementen y tienen que ver con muchas cosas.
*DyN: ¿En el nuevo CD muestra un nuevo estilo?
*AP: No pienso que haya una sola canción que forme el estilo, son un poco la mezcla de los ritmos que me influenciaron.
*DyN: ¿Cuáles fueron esos estilos musicales?
*AP: El pop, el rock y la música clásica, fusionados, son los que me influenciaron en lo personal, y además son mi fuente de inspiración en lo musical.
*DyN: ¿Los temas son vivencias o historias escuchadas?
*AP: Para escribir soy muy autorreferencial, escribo sobre lo que siento y pienso, en este disco compuse historias propias y otras ajenas, soy disímil como mis géneros de influencia, que son mis herramientas para componer.
*DyN: ¿Cuál es la temática de la canciones?
*AP: Hay historias de amor, de desamor, de soledad, y de cómo puede vivir uno en estos tiempos que corren de la humanidad, pero todos, independientemente de su historia, tienen un único mensaje.
*DyN: ¿Cómo compone?
*AP: Por ser sincero tengo una política y un pensamiento muy determinado al momento de plantear una forma de trabajo, tengo mucha hambre de aprender cosas que me nutran y modifiquen y así voy encontrando mi gusto.
*DyN: ¿Qué es lo que busca?
*AP: Quiero mostrar un estilo propio que sea reconocible, el estilo de Abel Pintos. Hay cosas en las que siento que tengo cierto sello personal.
*DyN: ¿Qué diferencias encuentra con otros artistas?
*AP: Cuando llega el tiempo de generar algo nuevo me siento parte de una generación que pretende encontrar su propia versión de las cosas espero que aparezcan más referentes de esta propuesta.
*DyN: ¿Qué pretende para los artistas de su generación?
*AP: Siento que los nuevos intérpretes deben respetar las tradiciones existentes, aprender constantemente de ellas, y generar nuevas facetas para generaciones venideras.
*DyN: ¿Cómo serán los shows en el Teatro Opera?
*AP: Vamos a presentar todos las canciones del disco en unos 40 minutos de show, el resto será con temas de toda mi carrera. (DyN)
Fuente: rionegro.com.ar
Abel Pintos, cada vez más cerca de la balada y el rock
"Mi folklore algún día será tradicional"
Pasaron quince años y siete discos desde que Abel Pintos empezó a cantar en público, siendo todavía un niño y cuando aún vivía en su Ingeniero White natal. Eran los tiempos en que Soledad empezaba a ser una figura importante en el universo de la música folklórica, y no eran pocos los proyectos de «niños prodigio» que circulaban. Pasado el tiempo, sin embargo, son muchos menos los que han logrado permanecer. Pintos es uno de ellos.
Periodista: Su estilo y sus búsquedas musicales fueron cambiando con el tiempo, pero ahora esos cambios son más evidentes hasta en el título de su nuevo disco «Reevolución».
Abel Pintos: Pasó que fui creciendo en edad y que las cosas fueron cambiando naturalmente. Tenga en cuenta que empecé de muy chico. O sea que este proceso de disco tras disco y de cambios fue acompañado también de un descubrimiento sobre las cosas que me gustan -o me fueron gustando en cada momento- de la música. Tengo la sensación, mirando ahora un poco hacia atrás, que fue a partir de mi tercer disco, «Cosas del corazón», cuando tenía 17 años, que la búsqueda empezó a hacerse mucho más propia. Mirado en perspectiva también, veo que hay un primer disco mucho más tradicional que marca de algún modo la influencia de mis padres y de mis referentes artísticos, y este presente, ya perfectamente instalado en Buenos Aires y mostrando todo lo que me ha pasado en estos años.
P.: ¿Quiere decir que también cambiaron esos que usted llama «sus referentes»?
A.P.: No es tanto que cambiaron sino que mis gustos se fueron nutriendo con otras cosas. Si antes estaban Atahualpa Yupanqui o Mercedes Sosa, ahora están también Divididos, Nirvana, León Gieco, Pedro Aznar.
P.: En relación a esos cambios que se han ido reflejando en su trabajo, ¿no le molestan los cuestionamientos de los sectores más tradicionalistas que puedan hablar de su estilo más volcado hacia el pop o la balada?
A.P.: En principio, no es algo que me importe especialmente. Pero la verdad es que más allá de algunos cambios de algo que podríamos llamar «vestiduras», el folklore siempre tuvo su parte romántica y baladística. Por ejemplo, Daniel Toro, al que hoy consideramos como un artista tradicional, tenía un estilo romántico hace 40 años y algunos lo criticaban por eso. En definitiva, yo me sigo sintiendo un artista de folklore aunque se muestren otras cosas también; en todo caso, ésta será mi visión del género en este tiempo. Y quién sabe si dentro de unos años no se lo considera también tradicional.
P.: ¿En ese mismo sentido, está la idea de mostrar fundamentalmente temas propios?
A.P.: Hace rato que la mayor parte de mis discos está formada por temas míos. Eso tiene su riesgo, pero yo compongo y lo más honesto me parece mostrarlo, darle mi sello a mi modo de cantar también con mis canciones.
P.: ¿Compone con regularidad o sólo cuando debe armar el repertorio de un nuevo álbum?
A.P: No soy de sentarme a escribir, ni lo hago con un instrumento. Voy cantando los temas, que me van saliendo en música y letra. Y cuando están listos se lo llevo a mi hermano Ariel, o últimamente a Marcelo Predacino (ambos, además, son coproductores de mi nuevo disco «Reevolución»- para grabarlo y hacer las primeras maquetas. A veces son temas que aparecen en los momentos menos esperados; por ejemplo en medio de una gira. A veces, empiezan a salir cuando me propongo buscar en determinado tema o en cierto concepto.
P.: ¿Cuánto tiene de suyo su trabajo y cuánto del aporte de la industria del disco?
A.P.: Tengo la suerte de trabajar con gente a la que respeto y en cuyas opiniones confío mucho. Productores como Afo Verde o Rafa Vila estaban entre las personas de este negocio a las que admiraba aún antes de trabajar con ellos. De modo que todo se charla, desde las canciones hasta el modo de hacerlas. No soy terco. Todo lo escucho, lo proceso, me tomo el tiempo para madurarlo. Finalmente, cuando me siento cómodo, acepto una idea y la hago mía. O sea que hay cosas que tomo y otras que no, pero como le digo, trabajo con productores creativos a los que me interesa escuchar.
Entrevista de Ricardo Salton - Ambito.com
Agosto 2010
Abel Pintos quiso "dar un paso más" con su nuevo material "Reevolución"
El joven músico, en este disco, ubica los sonidos del folclore tradicional en un contexto contemporáneo.
El músico Abel Pintos lanzó "Reevolución", un nuevo álbum de estudio en el que quiso arriesgarse a probar cosas nuevas y "dar un paso más". En su nueva producción, el joven cantante -que comenzó su carrera hace 13 años apoyado por León Gieco- vuelve a recorrer el género de la canción popular con elementos folclóricos.
Sin embargo, y fiel a su costumbre, el artista no se queda con las formas tradicionales sino que ubica los sonidos propios de la música argentina en un contexto contemporáneo.
Y en esta ocasión, Pintos también decidió explorar nuevos terrenos, de ahí que "Reevolución" haya sido el título elegido por el cantante para bautizar su séptima placa. "Disfruto mucho de las cosas que he vivido, que fueron muchas y muy intensas. Pero quiero seguir creciendo y descubriendo más cosas".
"La intención fue no repetir la fórmula del disco anterior porque nos fue bien, sino buscar algo más. Si bien tiene conexión con lo que hicimos antes, tiene otras cosas. Por eso 'Reevolución', porque quisimos crecer, buscar dar un paso más en lo musical, desde la composición y desde mi carrera", explicó, en una reciente entrevista.
EVOLUCION ARTISTICA
Y si hay algo que puede definir la trayectoria de este músico es, justamente, la evolución; ya que Pintos comenzó a tocar profesionalmente siendo muy joven y hoy, a los 26 años, tiene un enorme trayecto recorrido.
"Creo que se fue dando disco a disco. Cada uno tiene que ver con la etapa de mi vida en la que se hizo. No por nada mi disco más ecléctico fue el primero, 'Cosas del corazón', que lo grabé a los 17 años, en ese momento en el que somos más eclécticos que nunca. Creo que durante algunos años más, cada disco será acorde a la etapa de la vida que esté transitando".
"Yo pienso que la diferencia con lo anterior es que interpretaba música más tradicional, pero siempre igual de folclórica que ahora. Porque a mi entender, la música popular de una época es parte de la música folclórica. Igual creo que lo mío pasa por el folclore no tradicional. Respeto mucho las tradiciones, pero me interesa plantear cosas que, Dios quiera que con el paso del tiempo y la fuerza del trabajo, se puedan transformar en tradición",
expresó.
LAS LETRAS
En cuanto a las letras, "Reevolución" tiene temas con una fuerte carga emotiva, debido a que el folclorista se inspira para escribir siempre que le pasan cosas que lo movilizan internamente.
"Yo soy bastante autorreferencial a la hora de escribir. Todo lo que signifique un movimiento emocional para mí seguramente será un buen motivo para escribir una canción. No me siento a escribir canciones, escribo cuando lo que tengo adentro me pide salir. Igual en este disco compuse por primera vez algunas canciones basadas en otras historias, aunque también tienen cosas mías", explicó.
Fuente: Diario El Dia
Cerca de la reevolucion
A sus 26 años, es una de las figuras más convocantes de la música popular argentina. A días de lanzar su séptimo disco, afirma: "Propongo mi versión del folclore".
La gente aprovecha el día soleado en la Ciudad, y plaza Armenia es un reflejo de ello: decenas de personas disfrutan del buen clima. En la terraza de un bar sobre Costa Rica, Abel Pintos espera a Noticias Urbanas debajo de una sombrilla, mientras da los últimos tragos de un jugo frutal. Amable, se muestra con ganas de hablar y lo hace de manera rápida, casi sin pausas. El tema ineludible es su reciente trabajo, Reevolución.
–¿Cómo se gestó el disco?
–Siempre me junto con quienes van a trabajar en la producción, Marcelo Predacino y mi hermano Ariel en este caso, y con la gente de la compañía. Charlamos las ideas que tengo yo del concepto del disco y las cosas de las que quiero hablar. La compañía aporta su idea de cómo desarrollar el trabajo ya hecho y la persona que trabaja en la producción también da su opinión. Ahí armamos el concepto y una vez que tengo en claro qué va a decir el disco, empiezo a componer.
–El título encierra varios conceptos.
–El juego de palabras de la re-evolución es porque me fue muy bien con cada uno de los discos que saqué hasta ahora y se había generado una expectativa con el disco nuevo, muchos de los que habían escuchado los discos anteriores esperaban la reacción que tenemos los humanos frente a algo que nos da éxito y cómo nos solemos aferrar a eso, tratando de sacarle todo el jugo posible. Yo no quería repetir una fórmula, quiero seguir descubriendo cosas y evolucionando dentro de mi música con lo que pasa en mi carrera. En pocos años viví muchas cosas muy intensas pero soy muy joven todavía y no quiero quedarme con una sola fórmula de vida y carrera. Todo eso generó en mí una revolución a nivel emocional, mental, porque te planteás cosas de otra manera, te replanteás cosas, usás el mismo tablero pero planteás un juego distinto. Además busco títulos que sean cortos y con un impacto, que digan cosas atrás, un mensaje. Revolución y reevolución, los dos en una misma palabra, eran conceptos muy fuertes y en una palabra muy concisa.
–¿Sigue existiendo el enfrentamiento entre los conservadores o puristas del género y los integrantes de las nuevas camadas?
–Me parece que pasa en todos los géneros de la música, como en todos los géneros de todo: literatura, música, cine. En todo hay personas que se enamoran de una época o etapa, ahí se quedan para siempre y dicen que eso es lo mejor. Después están los que reconocen que eso es bueno, pero que también quieren lograr lo propio y seguir aportando –espera un segundo, ríe cómplicemente, y aclara–, entre ésos estoy yo.
–¿La puja es por un cambio en el género?
–Yo propongo mi versión de la música folclórica con el único y sincero deseo de aportar. No quiero cambiar al folclore, el folclore es algo que yo quiero y admiro muchísimo, pero deseo aportar algo más, una nueva línea o rama. Pero desde el folclore, desde el concepto de folclore, desde la música popular argentina.
–¿Es posible que la música quede desactualizada?
–No, porque siempre hay grupos de personas que se quedan prendidas a cada etapa. El Chaqueño Palavecino es un folclorista tradicional, pero que dentro de su estilo tiene un audio y una forma de tocar muy contemporánea. Él suena a la vanguardia dentro del estilo tradicional y yo voy a la vanguardia dentro de otro estilo, el de innovar, el de nuevas ideas. No es querer cambiar, es presentar nuevas ideas.
–¿Qué te parecen las bandas que desde otro estilo, como puede ser el rock, toman elementos del folclore?
–Entienden muy bien la esencia del folclore. El folclore no es un género de música por definición. Sino sólo la Argentina tendría folclore y todos los países tienen el propio. El folclore por definición es lo que identifica a una cultura, a un lugar y a la gente que vive en ese lugar. Para mí es tan folclórico un disco de Los Palmeras, uno de Divididos como uno de Los Cantores del Alba. Son músicas que identifican a esta tierra.
–¿Cómo se hace para instalar en el público el material nuevo?
–A mucha fuerza de trabajo. Los medios difunden los temas y después están los conciertos, tocar, tocar y tocar para llegar a todo el público de esa forma. En los shows hacemos canciones de los discos anteriores también, porque en los festivales de una lista de 20 temas sólo cinco son nuevos, el resto son las canciones que la gente quiere escuchar. Después hay shows en teatros o estadios donde los que van es porque quieren escuchar el material nuevo, y ahí tocamos el último disco casi entero.
–¿Por qué incluiste el cover "Halleluja"?
–En 2004 empecé a componer. Reflejo real (2005) y La llave (2007) no tuvieron canciones de otro autor, y como toda mi primera etapa fui intérprete, quería volver a divertirme haciendo mi versión de la canción de alguien más, que a su vez complementara el mensaje que yo desde mis letras quise darle al disco.
–¿Cómo fue la elección de Marcela Morelo como invitada?
–Invito a personas que siento que van a aportar algo que una canción necesita. En el caso de "Aventura", compuse la canción y sentí que era muy tierna y había que enaltecer esa parte de la ternura, entonces pensé en Marcela, que la conozco hace mucho, la admiro y es una de las mejores cantantes de la Argentina, con un timbre que parece una chica de 15 años. Me pareció exacta y realmente fue así.
–¿Qué pensás de los artistas que van a los medios para opinar de política?
–Deben tener una idea muy formada de las cosas que vayan a decir. El arte tiene que ver con expresar las cosas sentidas y llega un momento que desean también expresar, en este caso, sus pensamientos e ideas políticas. Mientras sea constructivo puede estar bueno. Es una obligación de todos nosotros el tener siempre una postura política. Mi pensamiento es que si tenés una postura y salís a hablar de eso, salí con una postura formada con la intención de generar un cambio para el bien de todos. Si no, quedate en tu casa.
Fuente: Noticias Urbanas
"Cantaré todos los días que me queden por vivir"
De promesa del folclore nacional a compositor maduro y atrevido, Abel Pintos recorrió un largo camino hasta llegar a su séptimo disco, "Reevolución", cuya salida el cantante acompañó con un cambio de look.
- PorPor Geraldine Mitelman Gmitelman@larazon.comar
"QUIERO MOSTRAR QUE SE PUEDEN CAMBIAR LAS COSAS QUE SAN TRADICION", DICE.
Marche un cambio de look para Abel Pintos, el pibito de Ingeniero White, que folcloreaba bajito al lado de un cartel invisible (pero enorme) que lo señalaba como la gran promesa del Cosquín de aquellos años y bajo el ala protectora de su padrino artístico, León Gieco y de otros como Víctor Heredia y Horacio Guarany, que advirtieron temprano su talento. Pintos cumplió con todo y con todos. Y creció como pocos artísticamente: se consagró en Cosquín, triunfó dos veces en el Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar, alzó estatuillas en Jesús María, tiene un Premio Gardel y acaba de editar su séptimo disco, “Reevolución”, Con ese último trabajo, se animó a los cambios. Sobre todo a uno de look. “Sí, me rapé, porque quería acompañar el concepto del disco. Independientemente de lo bien que te vaya con una etapa, siempre es momento de comenzar una nueva. Además de plantear algo distinto de lo que venía haciendo, quería acompañarlo con un cambio estético. Cambiar de color no es como una careta. Los músicos a los que admiro, por disco cambian la estética: desde Madonna, hasta Chris Cornell y Marc Anthony.
En el folclore no pasa mucho...
Por eso mismo, con los artistas que admiro de otros géneros, sí. También pasa en el rock nacional, que disco tras disco se cambia de concepto, incluyendo la imagen.
¿Tenés intenciones de renovar el género folclórico?
Tengo la intención de mostrar que se pueden cambiar las cosas que ya son tradición. Cuando Daniel Toro y el Cuchi Leguizamón aparecieron con 20 años haciendo música, no lo hicieron con una versión tradicional del folclore y sin embargo hoy son tradición. El Cuchi le aportó al folclore armonías del jazz.
Y en tu caso, ¿cuál es el aporte?
Nuevas formas de composición, por ejemplo “Peregrino” (del último disco), viene de la familia de la chacarera, pero no es chacarera. “Amame”, nació bajo la estructura de un rasguido doble, y cuando lo escuchás, no te lleva al río. “Aventuras” (con Marcela Morelo), también nació bajo la estructura de un rasguido doble y se termino transformando en una bachata. “Solo” es una zamba interpretada muy distinta y con una vuelta armónica. Ojo, tampoco es mi intención quedar como un revelador de nada, sino que doy mi versión de mis propias canciones.
Con el disco anterior, “La llave”, habías abierto la puerta literalmente.
Sí, porque cuando empezás a componer tus propias canciones tenés otra libertad que cuando interpretás. Y ahora, en “Reevolución”, más que nunca.
Aparte del juego de palabras, ¿qué otra explicación hay?
Es una nueva etapa de mi vida y de mi carrera. Desde lo personal, por experiencias de mi vida que me han hecho crecer, y dentro mío hay una revolución absoluta.
¿Cómo afrontás los cambios?
Los disfruto, sabiendo que si estoy en una etapa nueva, hay cambios y disfruto de eso. Tiene que ver con las experiencias. Llevo quince años de carrera.
¿Imaginabas llegar hasta acá?
Imaginaba esto, nunca con un tiempo determinado. Y si lo hubiera hecho, nunca tan pronto.
¿Creés que serás tradición?
Pienso que somos muchos los que estamos planteando cosas para que el día de mañana seamos tradición. Hago música y voy a cantar todos los días que me quedan por vivir.
"El ser humano y su música son cosas demasiado siderales como para encasillarlas"
Para no desentonar, Abel cambió también su imagen (decidió prescindir de su cabello ensortijado) y la savia que corre por su música. "Re-evolución" (Sony), su flamante álbum, es un sube y baja de sensaciones. Abel le canta al amor que duele y al amor que brilla y también, de a ratos, estampa sus convicciones más profundas acerca de la sociedad en la que vivimos.
"Si bien sigue mi línea, este disco es distinto a los demás porque le agrego más ingredientes a mi estilo. Por eso hablo de re-evolución, porque estoy comenzando una etapa nueva", explicó a El Tribuno. El cantautor hoy deleitará al público salteño en la Mega Peña Cerrillos, un evento que se llevará a cabo a partir de las 21.30 en el complejo deportivo de esa localidad. Completarán la cartelera Los Izkierdos de la Cueva, el Grupo Trébol y Alito Salim. Las entradas, desde $25, están en venta en Salta (Híper Libertad y Buenos Aires 85) y en Cerrillos (avenida Güemes 197 y 116).
En tu nuevo disco hay una riqueza compositiva muy grande...
Siempre dije que soy un artista muy ecléctico; me gusta variar, me gusta que en un mismo disco entren distintos ritmos. Me alegra que se perciba.
¿Estás revolucionado, evolucionando?
El nombre del disco es un juego de palabras. Habla de que, independientemente de lo bien que me fue con los discos anteriores, ahora hice un álbum en el que la gente puede reconocerme porque sigue mi línea, pero es distinto a los demás porque le seguí agregando más ingredientes a mi estilo. Por eso hablo de re-evolución, porque estoy comenzando una etapa nueva. Este salto implica, a su vez, que dentro nuestro muchas cosas se revolucionen.
¿Por qué tenés la certeza de que es una etapa nueva?
Por las cosas que he vivido antes de empezar a componer el disco. Todas las emociones que experimenté con los trabajos anteriores fueron muy gratas para mí y me generaron ganas de vivir nuevas experiencias y aprender más. Es una nueva etapa porque tengo un nuevo punto de vista frente al amor, frente a mi familia, a mis amigos, a mi fe, a mi música, a las cosas que conozco y que desconozco. Tengo ganas de aprender más, de descubrir más, voy formando nuevas opiniones... Es un cambio que he buscado.
Incluís un tema que cantás con Marcela Morelo. ¿Por qué decidiste hacer dúo con ella?
La canción se llama "Aventura" y la escribí en el verano, durante una gira. Cuando terminamos de redondear la música con mi hermano Ariel y empezamos a pensar en los arreglos, le dije: "¿No te parece que a esta canción tengo que compartirla?". Me dijo que sí y entonces pensé en Marcela Morelo, porque suena a ella. Parece una canción suya interpretada por nosotros. Y la invité. Además, la admiro desde hace muchos años y la quiero profundamente, porque somos amigos. En noviembre de 2008 la invité a cantar en el Teatro Opera de Capital Federal. Se generó un clima tan lindo que, a partir de ahí, comencé a fantasear con plasmar esa energía en algo más duradero, como un disco.
El "Halleluja" (Aleluya) que cantás, y que la mayoría conocemos por la versión de León Gieco, entra en el puñado de canciones de tinte más social que tiene tu disco. El otro tema preponderante es el amor...
Sí, elijo hablar de la sociedad desde una perspectiva esperanzadora. Siento que ésta es una nueva etapa porque observo de manera diferente en todos los órdenes de la vida. Por eso canto "No me olvides", que es un tema que uno le puede cantar tanto a un amor como a la familia o a los amigos cuando uno se aleja. Por eso canto "Aventura", que es una canción de amor puro; y canto "Solo" que es una canción acerca de un amor confuso; por eso canto "Halleluja", parándome frente a la religión y a los valores; y canto "Revolución", describiendo cómo uno puede cambiar desde la mente y el espíritu, sin esperar que todo alrededor cambie... Todo esto tiene que ver con mi vida.
¿Considerás que tu música se enmarca en lo que se llama folclore de proyección o creés que te estás alejando de esta categoría?
Yo considero que soy un músico folclórico porque canto música popular argentina. Sé que no soy un músico tradicional, pero quizá mi música el día de mañana sea tradicional, porque las tradiciones nacen con el tiempo. No suelo catalogarme ni catalogar la música. Me parece que tanto el ser humano como su música son cosas demasiado siderales como para encasillarlas.
¿Dónde sentís que tu comunión con el público es más efectiva, en un teatro o en un festival?
En los dos lugares por igual, porque la gente sabe que mis conciertos en un teatro son completamente distintos a los de un festival. En los dos lugares logramos una conexión que depende de la situación y del repertorio. En este disco nuevo hay canciones que se van a disfrutar mucho más en un festival que en un teatro, y viceversa.
¿Vas a presentar algunas de las canciones nuevas en Cerrillos?
Sí, voy a cantar algunos de los temas. La presentación del disco completo se hará a partir del año que viene, en una gira nacional que armaremos exclusivamente con este fin.
¿Te rapaste por algo en especial?
Sí, para acompañar el concepto del disco. Como es una nueva etapa, quise acompañar la idea desde la estética. La tapa del disco tiene un pedacito de la ciudad y mucho cielo. El mensaje de toda la gráfica es que entre la humanidad y la inmensidad hay un horizonte, donde estamos parados nosotros. Y uno puede elegir emocionalmente en qué lugar estar. Podés tener la cabeza en el día a día, pero también podés tener momentos de elevación espiritual.
¿Estás solo, Abel? En el disco sonás muy enamorado....
Estoy solo, pero el hecho que no esté en pareja no quiere decir que no experimente cosas con respecto al amor que me nutran. A veces estoy en pareja, pero me gusta reconocerlo recién cuando ha pasado mucho tiempo. En esta etapa de la vida, algunas duran poco y otras mucho, entonces, ponerle a todo el mismo rótulo genera confusión. Hoy, literalmente estoy solo.
Fuente: El Tribuno de Salta
"Hago folklore no tradicional"
Abel Pintos explica el concepto por detrás de "Revolución", un nuevo disco en el que se muestra desprejuiciado y maduro al mismo tiempo.
SE MUESTRA. "Revelo todo a partir de mis canciones", dice Pintos.
Germán Arrascaeta
De tanta confianza en sí mismo, Abel Pintos puede sonar sobrador. Ahora, el joven folklorisa de Ingeniero White tiene que defender Revolución, un disco cuyo diseño de tapa tiene al título con dos "e", lo que sugiere que toda transformación radical se hace con la idea de conseguir cierta "evolución". Ya en el teléfono, el aguna vez triunfador de nuestros festivales de verano se expresa como en la obra o como está sugerido arriba: desprejuiciado, suelto; vibrando en un alto nivel sin importarte en qué registro lo hace. "El disco puede dar una imagen de liberado de ataduras, pero tuve muy en claro lo que quería mostrar como estética general. Considero que es un disco de música folklórica no tradicional. Folklore y tradición son dos palabras que se unen, se complementan, pero que encierran conceptos distintos. Las tradiciones se hacen con el tiempo", alerta.
Luego, este Pintos analítico que ya llegó a los 27 detalla: "'La Mona' Jiménez apareció hace años y con la defensa de su estilo a través de los años, generó cierta tradición en el cuarteto. En el folklore pasó y pasará lo mismo. Los hermanos Abalos eran novedosos hasta que irrumpió Daniel Toro con una forma nueva. Toro fue nuevo en su momento; 40 años después, es tradición. Revolución es música popular argentina, con arreglos pop menos pop, más rockeros menos rockeros, más centroamericanos menos centroamericanos... Todo es pura cuestión de estética musical. El disco es mi versión de la música folklórica. El paso del tiempo, la defensa que haga de mi música y la seriedad con la que lo encare lograrán que se transforme en tradicional".
– A propósito de concepto motor, ¿fuiste revolucionando a medida que fuiste creciendo?
– Sí, siento que cada disco tuvo que ver con cada etapa de mi vida y su correspondiente energía para cambiar algo. Cada paso que daba desde lo personal, cada evolución desde ese lugar, después lo canalizaba a través de la música. Este disco habla de eso. Si bien mi disco anterior tuvo mucho éxito, siento que tengo mucho más por buscar, por descubrir. Pretendo seguir evolucionando y revolucionando. La llave, mi disco anterior, me dejó tan satisfecho que podría haber repetido su fórmula. Pero no, el estilo definitivo llegará con los años.
– Nunca te comportaste como una estrella pop. No obstante, ¿aué estás dispuesto a conceder en relación a tu vida personal?
– Revelo todo a partir de mis canciones. Si aparecen cosas que son indiferentes a mi carrera... No me molesta contar determinadas cosas. No estoy en pareja, de hecho. Pero no me gusta basar los reportajes o mis momentos con el público en si estoy con alguien o no. Aun así, en mi música doy a conocer muchas cosas de mí, soy muy autorreferencial. De los cuatro discos que llevo como autor, Revolución es el primero en el que compuse canciones referidas a otras historias. Aun así, tiene frases que son parte de mi realidad. No es una cuestión de no querer hablar de mí, lo hago desde la canciones. Y de una manera bastante directa, no soy metafórico.
– En el orden de las canciones, "Abismo" está antes que tu versión del "Aleluya". ¿Casualidad?
– Está relacionado a un punto de vista puntual. Estar al borde del abismo en la vida de cada uno, puede ser un buen motivo para gritar ¡¡¡aleluya!!! Si estás al borde, todavía no caíste. Soy un tipo muy positivo. Me encantaría que se pueda leer de esa forma.
–En el disco tocan músicos relacionados al rock. ¿Seguirán en tu banda o son sólo sesionistas?
–El que integra mi grupo es Marcelo Predacino, que también produjo el disco junto a mí. Por otra parte, Colo Belmonte y Dani Castro son músicos que, como yo, tienen una dualidad muy firme. Marcelo toca conmigo pero también hace conciertos con Fabi Cantilo, con el Pelado Cordera; fue arreglador de Teresa Parodi, de Soledad y tiene su propio disco de homenaje a Atahualpa Yupanqui. Dani Castro grabó su propio solista con aires nativos. Todos ellos fueron convocados porque interpretan esa lectura que yo hago entre lo folklórico y lo tradicional. Ellos piensan que Divididos es tan folklórico como yo.
– Me resulta sugestivo el agradecimiento a Dios en el sobre interno. ¿Es una simple vibración espiritual o te mueve la convicción religiosa?
– Limito los agradecimientos a una frase. Y elijo una que grafique mi gratitud y la felicidad que me producen las personas que se saben destinatarias. Creo en Dios y tengo una profunda fe. Pero es mía, no quiero influenciar a nadie. Por eso aparece Dios sin ningún problema.
Fuente: La Voz del Interior
Febrero 2010
Abel Pintos: "Tengo público de todas las edades"
Trayendo el repertorio de uno de los mejores discos solistas del año pasado, "La llave", el cantautor bonaerense cerrará hoy la primera noche del Festival Nacional de la Tonada.
El músico asegura que es en nuestra provincia donde su último disco tuvo mayor repercusión.
jueves, 05 de febrero de 2009
Viene de cantar en el último Cosquín, donde el año pasado fue elegido "artista consagración" frente a 10 mil personas, aunque admite poner el mismo entusiasmo si le toca subirse al escenario de un pueblo alejado, frente a una docena de espectadores.
Cantautor educado y fortalecido en las rutas, festivales y auditorios desde hace una década, Abel Pintos es uno de los pocos artistas nacionales que atrae a un gran abanico de
espectadores -lo siguen desde adolescentes hasta los adultos mayores- y es también uno de los músicos que más transita anualmente las rutas argentinas y, como ejemplo, este enero él y su banda ya tocaron en Entre Ríos, Buenos Aires, Córdoba, Catamarca, Santiago del Estero y Mendoza, en Rivadavia, el 31, a lo que se suma esta noche Tunuyán.
-¿Cómo será el repertorio del recital de hoy?
-La lista de temas en sí es la misma para toda esta gira. Lo que pasa es que siempre depende del tiempo que te dan los organizadores en cada festival. Esta noche el show durará alrededor de una hora y sin duda es un repaso por el disco nuevo. Digo un repaso porque el año pasado lo presenté acá en festivales y en un concierto propio y ahora la gente conoce cada una de las canciones.
"La llave" ha sido un disco que ha tenido gran repercusión en el país pero sobre todo en esta provincia. Lo comprobé en setiembre cuando lo presenté en Godoy Cruz, donde vino a verme gente de toda Mendoza y de todas las edades.
-Como a otros cantantes famosos, ¿a veces te resulta difícil salir a la calle?
-No lo sufro para nada, al contrario. En realidad no es que sienta un acoso. Pienso que todos se dan cuenta de que no me dedico a vender una imagen del tipo sex symbol, del tipo galán. Cuando la gente se acerca a saludarme lo hace con cariño y eso me alimenta, me nutre, me hace súper feliz. Soy un tipo más de la calle que se dedica a la música. Esto no marca ninguna diferencia de status.
-Sos uno de los pocos artistas folclóricos que más amplitud de público tiene. ¿Has notado eso?
-Sí claro, me he dado cuenta y eso me emociona porque es como compararme con León Gieco, que tiene la misma característica. Siempre quise identificar a distintas generaciones. De alguna manera disfruto que una de mis canciones pueda gustarle a una chica de mi edad o a un adulto; me emociona.
Es como comprobar la universalización de la música. Por otro lado pienso que se debe también a que empecé de tan chico (a los 13 años, apadrinado por León Gieco) y proyecté una imagen familiar desde el principio. Era un nene con un grande de la mano, que pensaba en el futuro.
-Tenés 200 mil visitas en tu sitio oficial, un récord nacional. ¿Qué pensás de eso?
-Sí, la verdad que es un gran número. En primer lugar mi página se ha convertido en un espacio de encuentro para la gente que me sigue; también en un lugar donde cualquier persona de cualquier punto del país se puede enterar todo el tiempo de lo que estoy haciendo.
Por eso subimos las fotos de todos los conciertos y van desde los teatros, hasta los de una peña de barrio, aunque cante para miles o para una docena de personas.
Lo que quiero es que la gente pueda seguir lo que voy viviendo en las giras. Desde los detalles de qué remera me puse, si cambié el look, si tuve invitados. De alguna manera también me sirve para promocionar los festivales. Renovamos la información cada dos días.
Abel abandona la charla expresando su deseo de seguir haciendo nada en aquel hotel de Tunuyán, mientras su familia y sus músicos se sumergen en la misma terapia.
Sin embargo, la gira de "La llave", un álbum que trasciende el encasillamiento del folclore y sintetiza la madurez de su autor, está lejos de terminar. Aunque desbordó dos teatros Óperas en Buenos Aires y fue ovacionado de pie en Cosquín, todavía tiene una agenda cubierta hasta julio.
Pablo Pereyra - ppereyra@losandes.com.ar
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